A un vil...

Acudí a su vil pasión
y con mi voz dejo abierto
un camino a su desierto,
donde yace mi razón.

Al que quiera mis fracasos,
lea mi pulcra cuarteta;
con letras color violeta
y hurte mi alma en sus acasos.

Esta redondilla andante,
usted deberá cederme
dejada para encenderme
cesando de ser mi errante;

qué a su amor ya no le cedo
ni un lloro al anochecer,
y tener que aborrecer
lo que usted dejó en mi aedo.



En/Inercia.
© Copyright
All rights reserved.
2010.